Esas pequeñas experiencias diarias que te hacen sentir mejor inconscientemente.
Tal vez no lo hayas notado, pero existen pequeños placeres que puedes experimentar a diario y a lo largo de tu vida. Y no son más que esas cosas que te sacan una sonrisa o un suspiro de alivio, de las cuales, a veces, no te percatas de que están ahí para ti. En este artículo, descubrirás esas acciones que, por más imperceptibles que sean, valen la pena vivirlas.
· Escuchar música: Hay muchas personas que no pueden vivir sin ella. La escuchan mientras se duchan, conducen, dibujan, leen o hasta duermen. Así como hay otras personas que no son tan amantes de la música, pero que, aún así, tienen sus canciones favoritas.
· Tomar té o café: Seas amante de uno o del otro, esa bebida caliente una vez al día te da una satisfacción muy grande. El aroma, la temperatura, el primer sorbo, ese es un ritual que disfrutas a lo grande. Muchas veces lo disfrutas tanto que una sola taza no es suficiente. Así que la próxima vez que tomes esta bebida, disfrútala con todos tus sentidos.
· Tomar agua bien fría: A veces el calor en el día es inclemente y, en otras ocasiones, tu rutina de ejercicios te deja agotado. Un vaso de agua fría es todo lo que necesitas para soltar un gran suspiro de satisfacción. Y aunque el agua no tenga color ni sabor, el placer es tan grande que al finalizar, exclamas: ¡Qué rica es el agua!
· Quitarse el sostén o la corbata: Al llegar a casa luego de una rutina agotadora, lo primero que quieres hacer es despojarte de tu ropa. Sin embargo, existe un momento en específico que es de gran liberación, es el de quitarte el sostén o la corbata. Esa prenda incómoda que te ha estado molestando todo el día y que al quitártela, sólo exclamas: ¡Soy libre!
· Bañarse: Si eres de esas personas que disfruta el agua tibia corriendo por tu cuerpo o un buen chorro de agua fría que refresque tus sentidos, entonces tomar una ducha es tu placer sin culpa. Disfruta ese momento como ningún otro al comenzar y/o finalizar el día.
· Comer: Al hacerlo todos los días, puede suponer una rutina, que puede llevarte a que olvides lo maravilloso que es. Al comer, tómate la tarea con calma y disfruta cada bocado, verás que, además de percibir cada sabor, quedarás más lleno.
· Dormir: Luego de tomar un rico baño y comer, el momento más esperado durante el día es ese en el que te tiras en la cama y abrazas la almohada, esperando caer en los brazos del increíble Morfeo. Dormir, además de ser saludable y un renovador de energía, es uno de esos placeres que experimentas a diario y que, sin duda alguna, es tan necesario como respirar.
· Reír a carcajadas: Esto debe ocurrirte, al menos, una vez al día o algo no está saliendo como debería. Reírse es un placer que une masas y que estimula el organismo. La sensación satisfactoria que queda luego de reírte con muchas ganas es ese pequeño placer que no deberías dejar de experimentar nunca.
Seguro tienes algunos pequeños placeres que, para ti, son esenciales y los cuales te has puesto a nombrar luego de leer este artículo. Puedes compartir eso y mucho más con Aisha Stambouli a través de sus redes sociales, en las que conecta con sus seguidores y te muestra día a día cómo es la vida de una cantante y una compositora exitosa. ¡No olvides compartir sus publicaciones!
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viernes, 31 de marzo de 2017
Pequeños Placeres de la Vida que Suceden a Diario
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